Este artículo propone una lectura de la filosofía de la comunidad de
Maurice Blanchot a partir de sus Escritos políticos. La
tensión entre los documentos vivos (octavillas, cartas, proyectos)
redactados por Blanchot sobre todo en los “mayos” del 58 y del 68
y la elaboración filosófica de la noción de comunidad ya en el 83,
arrojan nueva luz sobre la necesidad y los términos de una
actualización de la exigencia comunista. La hipótesis de este
trabajo es que el concepto de comunidad cancela la posibilidad de
ruptura revolucionaria de la que partió el pensamiento de Blanchot y
la reconduce a un comunismo de pensamiento de raíz ético-literaria.
Finalmente, se esbozan esbozan las claves para ir más allá, hacia
una política del mundo común.